La isla de calor que provocan las ciudades aumentan la intensidad de las olas de calor

La isla de calor urbana que provocan las ciudades, sobre todo en las grandes urbes, aumentan la intensidad de las olas de calor.

No cabe duda de que la temperatura global de nuestro Planeta ha aumentado en las últimas décadas. Y tampoco hay discusión acerca de que las zonas urbanas crean las llamadas ‘islas de calor’, áreas donde la temperatura aumenta debido a la actividad humana y a la acumulación de ciertos materiales absorbentes de calor que proliferan en las ciudades.

Ahora, un estudio de investigación ha cuantificado el efecto de la isla de calor urbana en el calentamiento global del Planeta, y en concreto en la intensidad de las olas de calor, usando diversos modelos matemáticos que simularon con detalles los cambios de temperatura que estamos sufriendo en los últimos años.

¿Qué es la isla de calor urbana?

Las grandes urbes aumentan la temperatura de la atmósfera.

Es un hecho irrefutable que en algunas grandes ciudades es ahora más difícil ver la nieve que hace unas décadas o que las temperaturas máximas o mínimas son más altas que en zonas próximas de forma sistemática.

Esto se debe al efecto de la isla de calor urbana o lo que es lo mismo, la acumulación de calor propiciada por materiales que absorben con facilidad el calor, como el hormigón, el asfalto, el ladrillo.

Además de la ausencia de zonas verdes y la generación de gases contaminantes, que participan en el denominado efecto invernadero.

En color rojo se puede observar las islas de calor notables presentes en España, en las áreas de Madrid y Barcelona (Wikipedia)

Es un efecto presente en las grandes ciudades que se caracteriza por la dificultad para que se disipe el calor durante las horas nocturnas gracias a que esos materiales siguen desprendiendo el calor acumulado durante el día, mientras que en las áreas no urbanas éstas se enfrían notablemente por la falta de acumulación de calor.

Las islas urbanas intensifican las olas de calor

Según podemos leer en Geophysical Research Letters los científicos han comprobado que las islas de calor urbanas han hecho más largas y frecuentes en las últimas décadas.

Y asimismo, que la temperatura por encima del nivel de alarma por estrés térmico aumentó en un factor entre 1,4 y 1,5 durante este siglo.

Más efecto durante la noche y las olas de calor

Durante la noche, las diferencias generales de temperatura entre las ciudades y el entorno rural oscilan entre 1 a 3 ºC.

Pero el efecto de la isla de calor urbano se vuelve aún más intenso durante las olas de calor, con diferencias entre ciudades y áreas rurales que alcanzan hasta 8 a 12 ºC.

De hecho, núcleos urbanos como Bruselas ya experimentan en promedio cinco días calurosos al año con una intensidad media de 3 ºC por encima de los niveles belgas de alarma de temperatura.

Las temperaturas en Bruselas ya superan las temperaturas en las zonas rurales, donde sólo hay dos días de ola de calor por año, en promedio, con un exceso de temperatura de menos de 1 grado Celsius.

Los Ángeles quiere enfriar la temperatura del suelo

Para combatir este efecto, grandes urbes como Los Ángeles han planificado tomar ciertas medidas.

Allí han comenzado a pintar han pintado el pavimento de sus calles de color gris utilizando un recubrimiento especial llamado CoolSeal que fue desarrollado originalmente para ocultar el calor creado por las pistas de aterrizaje, haciéndolas menos visibles a los satélites espía.

CoolSeal refleja mejor los rayos solares, lo que reduce la temperatura del suelo, esta pintura ya ha sido probada en un estacionamiento en una de las partes más calientes de la ciudad.

Los técnicos han comprobado que el área cubierta con CoolSeal estaba 10ºC más fría que el asfalto negro en el mismo estacionamiento.