Borrasca Hugo, imagen visible de alta resolución. Adquirida por el sensor MODIS, satélite TERRA de la NASA. 23 de marzo de 2018.

La borrasca Hugo, formada a partir de un proceso de ciclogénesis explosiva, lleva asociado un intenso temporal. Aunque ya se está notando en este Viernes de Dolores, se hará especialmente notorio mañana, Sábado de Pasión. Además, y como veremos a continuación, otra borrasca se formará en el Mediterráneo, a la par que Hugo se diluye. Una evolución atmosférica que determinará las condiciones meteorológicas en este arranque de la Semana Santa 2018.

Ciclogénesis explosiva.

Borrasca Hugo en el mapa isobárico de superficie y frentes. Hoy, viernes 23 de marzo de 2018, 12 UTC.

Conviene recordar qué son las ciclogénesis explosivas, aunque ya lo hemos repetido docenas de veces.

Una ciclogénesis explosiva o bombogénesis es un proceso meteorológico por el cual se forma una borrasca muy profunda en un periodo de tiempo relativamente corto; es decir, la borrasca que se forma a partir de este proceso sufre una caída de presión, o profundización, muy significativa en un periodo de tiempo relativamente corto. Y la borrasca así formada puede recibir el nombre de bomba meteorológica, como las están denominando fuera de nuestro país, weather bomb.

De forma más técnica, existen criterios para evaluar estos procesos, y así poder identificarlos correctamente.

Se trata de valores umbral para poder definir un proceso de ciclogénesis como explosiva: Sanders-Gyakum (1980) las definieron como aquellas en las que la caída de la presión central en superficie, en un periodo de 24 horas, es superior a 24 • senα / sen60, siendo α la latitud promedio del centro de la baja durante ese periodo (18 hPa / 24 horas, para 41º), siendo igualmente válidos, múltiplos de este ratio, es decir, la mitad del valor obtenido, para un periodo de 12 horas en vez de 24.

La caída de presión en el centro de la borrasca Hugo ha superado ampliamente el valor umbral que le corresponde por latitud.

Seclusión cálida.

También se da la particularidad de que Hugo, en su desarrollo, también ha adquirido esta naturaleza. Así, el proceso de ciclogénesis ha sido tan rápido e intenso, que ha conseguido atrapar en niveles bajos y medios una «burbuja» de aire cálido. Este tipo de ciclones, aunque extratropicales, llegan a tomar algunas características subtropicales que los hacen bastante especiales.

Hugo se disuelve, a la vez que otra borrasca nace en el Mediterráneo.

En ambos mapas: temperatura (colores) y altura geopotencial (líneas) para el nivel de 850 hPa. Izquierda, previsión para mañana sábado, 12 UTC. Derecha, previsión para el domingo, 00 UTC. Modelo GFS.

En los dos mapas de arriba se aprecia perfectamente. Mientras la borrasca Hugo llega mañana a la Península por el Golfo de Vizcaya, otra borrasca nace cerca de las Islas Baleares (Domingo de Ramos). Y, ojo, porque son dos borrascas diferentes. Es decir, Hugo se disuelve a la vez que nace la otra, y que no recibirá nombre al formarse en el Mediterráneo.

Un breve temporal que afectará a casi todo el país.

Rachas máximas de viento previstas para mañana (izquierda), 24 de marzo de 2018, a las 12 UTC. Y pasado (derecha), 25 de marzo de 2018, 00 UTC. Modelo GFS.

Y los Fenómenos Meteorológicos Adversos (FMA) protagonistas serán el intenso viento y el oleaje. Primero, el que se asocia a la borrasca Hugo; después, el que se asociará al nacimiento de la nueva borrasca en el Mediterráneo. Tal como vemos en ambos mapas, en algunas zonas se esperan rachas de más de 80 km/h.

Mapa de Avisos por Fenómenos Meteorológicos Adversos, FMA, previsto para mañana, 24 de marzo de 2018.

En consecuencia, el mapa de Avisos por FMA previsto para mañana, aparece repleto de colores. Mucha atención con el temporal marítimo que azotará mañana a la cornisa cantábrica.

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