La Niña ha desparecido de las aguas del Pacífico y la anomalía térmica superficial de aquella zona oceánica vuelve a sus valores normales. Después de unos meses en los que estuvo activo de forma débil este ciclo, entramos en un período neutro que se mantendrá al menos hasta el final del verano de 2018, cuando que probablemente vuelva a surgir El Niño de cara al próximo otoñoinvierno de 2018.

Seguramente, este episodio de La Niña que ahora finaliza haya sido el responsable de la temporada tan activa de huracanes que tuvimos durante 2017 en el Atlántico.

Las anomalías desaparecieron en abril

Según informa la NOAA durante abril de 2018, el Pacífico tropical regresó a ENSOneutral, de forma que las temperaturas de la superficie del mar volvieron a estar cerca o por debajo del promedio a lo largo del ecuador.

Concretamente, los últimos índices semanales de El Niño estuvieron cerca de cero en todas las regiones (entre +0.2°C y -0.3°C), excepto para El Niño-1+2, cual se mantuvo negativo (-0.6°C). Solamente las anomalías de la temperatura de la sub-superficie (promediando 180°-100°W) permanecieron positivas debido a una influencia continua del hundimiento de una onda oceánica Kelvin.

Condiciones meteorológicas

Como sabéis El Niño y La Niña también se reflejan en las variables meteorológicas, en este sentido, el último informe indica que en el mes de abril la convección se mantuvo suprimida cerca y al este de la Línea de Cambio de Fecha, mientras que la lluvia cerca de Indonesia también estuvo por debajo del promedio durante el mes.

Por su parte, los vientos en los niveles bajos estuvieron cerca del promedio a través de la mayoría del Océano Pacífico tropical, y en los niveles altos, los vientos estuvieron anómalamente del oeste sobre el este del Pacífico. En general, el sistema del océano y atmósfera reflejaron el regreso a condiciones ENSO-neutrales.

Previsión para los próximos meses

Respecto a los pronósticos sobre la evolución del ENSO (Niño – Niña) para los próximos meses, la mayoría de los modelos vaticinan unas condiciones neutras hasta el final del verano de 2018 (en el Hemisferio Norte).

Posteriormente, a medida que avance el otoño e invierno próximos, las condiciones del Pacífico deberían evolucionar hacia un ciclo de El Niño. Pero lógicamente, a tan largo plazo, la incertidumbre es alta y el pronóstico ya debe ser tomado con menos fiabilidad.

En estos momentos lo más probable es que las condiciones neutras se mantengan hasta noviembre de 2018.